Categorías¿Qué beneficios para la salud aporta el aceite de oliva?
El aceite de oliva virgen extra se ha utilizado en toda la historia de la civilización como alimento, pero también como ungüento gracias a sus propiedades medicinales, por ejemplo.
En los últimos años, y gracias al auge de la Dieta Mediterránea y el consumo de comida real, se han ido descubriendo qué beneficios para la salud aporta el aceite de oliva. En la actualidad, se siguen estudiando sus efectos, puesto que se ha demostrado científicamente que ayuda a mejorar nuestra salud cardiovascular y se considera un aliado contra el desarrollo de determinados tipos de cáncer, como el cáncer de mama. Además, el aceite de oliva cuida de nuestra piel, el órgano más extenso de nuestro cuerpo, y también de nuestro cabello.
El aceite de oliva es, sin duda, un ingrediente que no debe faltar en nuestro día a día, ya sea para cuidarnos por fuera, ¡como también por dentro! Descubre para qué es bueno el aceite de oliva e inclúyelo en tu día a día desde hoy mismo.
Salud cardiovascular
Gracias a su alto contenido en ácidos grasos monoinsaturados (en la variedad picual, por ejemplo, puede llegar a alcanzar hasta un 80% de su composición), el aceite de oliva virgen extra es capaz de elevar los niveles de colesterol HDL (colesterol bueno) y disminuir los del colesterol LDL o colesterol malo.
De esta forma, beneficia el control de la hipertensión arterial y reduce las probabilidades de sufrir determinadas enfermedades coronarias, como la aparición de trombosis, infartos de miocardio, arterosclerosis o, incluso, accidentes cerebrovasculares. Descubre más sobre cómo puede ayudar el aceite de oliva en tu salud cardiovascular.
Antioxidante
El aceite de oliva está compuesto, en gran parte, por polifenoles; los antioxidantes naturales por excelencia. En el aceite de oliva se encuentran los tirosoles, como el Tirosol y el Hidroxitirosol, pero también encontramos algunos que son exclusivos del aceite de oliva, como la Oleuropeína y el Oleocanthal.
Estos protegen a nuestro organismo contra los procesos oxidativos, evitando así el envejecimiento prematuro de nuestras células y órganos. A pesar de que estos procesos oxidativos son naturales y no se pueden evitar, sí que pueden ralentizarse. Determinados factores externos, como el tabaco, el alcohol o la contaminación, pueden acelerar estos procesos.
Neuroprotector
Los biofenoles del aceite de oliva son conocidos por sus actividades biológicas en la prevención de enfermedades y el mantenimiento de la salud. De esta forma, proporcionan neuroprotección y podrían desempeñar un papel importante en la ralentización de la disfunción cognitiva y el proceso neurodegenerativo.
Los compuestos fenólicos del aceite de oliva virgen extra son los responsables de estas propiedades neuroprotectoras. La Oleuropeína reduce la formación de placas de beta-amiloide (una de las responsables del desarrollo del Alzheimer); el Oleocanthal, por su parte, incrementa las enzimas que degradan el beta-amiloide.
El aceite de oliva mejora el estado cognitivo, ralentiza el deterioro cognitivo y, de esta forma, puede ayudar a reducir el riesgo de demencia, en la que la enfermedad de Alzheimer es el tipo más común.
Diabetes
Las grasas saludables, como las del aceite de oliva, ayudan a mantener los niveles de azúcar en la sangre, así como de la insulina.
El Hidroxitirosol es capaz de reducir y/o prevenir los problemas vasculares derivados de la diabetes mellitus. En esta enfermedad, los triglicéridos pueden llegar a lesionar los vasos sanguíneos, lo que puede llegar a producir arterioesclerosis. Es decir, en personas con diabetes mellitus, el indicativo de los triglicéridos cobra una importancia mayor, pues son los responsables de complicaciones mayores que suelen padecer las personas diabéticas.
Por otro lado, el AOVE no solo ayuda a controlar, sino que también ayuda a utilizar la glucosa de forma más eficiente, previniendo así la aparición de diabetes en personas sanas.
Un estudio de la Univesidad Sapienza de roma revela que la Oleuropeína es capaz de reducir la glucemia posprandial, es decir, de reducir los niveles de glucosa en sangre después de las comidas. Controlar la glucemia posprandial es crucial, puesto que estimula la producción de insulina.
Sobrepeso y pérdida de peso
A pesar de ser una grasa en sí, el aceite de oliva virgen extra es un gran aliado para adelgazar gracias a su alto contenido en grasas saludables, las cuales favorecen la quema de calorías.
La Oleiletanolamida proporciona un efecto saciante en las comidas, ayuda a acelerar el metabolismo y elimina las grasas saturadas y las trans, presentes en aquellos productos ultraprocesados. Las propiedades del aceite de oliva favorecen el tránsito intestinal, facilitando la expulsión de grasas, favoreciendo la digestión y evitando el estreñimiento.
Asimismo, el ácido oleico trabaja para evitar la acumulación de grasa en nuestro organismo.
Refuerza las defensas
Las sustancias antioxidantes del aceite de oliva, como la vitamina E y el ácido oleico, son fundamentales para proteger nuestro sistema inmunitario, ayudando a reforzar su actividad.
Además, el aceite de oliva tiene propiedades antibacterianas. El aceite de oliva aumenta las células implicadas en el sistema defensivo de nuestro organismo, presenta mayor resistencia a los patógenos y ofrece una mejor defensa frente a virus, bacterias y parásitos.
Antiinflamatorio
El consumo de aceite de oliva se relaciona con la producción de determinadas sustancias neuronales denominadas encefalinas, las cuales, reducen el dolor.
El Oleocanthal es uno de los mejores antiinflamatorios naturales, el cual ayuda a reducir dolores asociados con las articulaciones y los músculos. De hecho, la artritis reumatoide disminuye sus síntomas gracias, en parte, al consumo de aceite de oliva.
En el caso de la artritis reumatoide, el aceite de oliva virgen extra reduce la inflamación y el estrés oxidativo en los individuos con esta condición.
Prevención del cáncer
El aceite de oliva virgen extra, siempre en el contexto de una dieta sana y equilibrada, proporciona Omega 3, antioxidantes y vitaminas.
Los compuestos del aceite de oliva, como los grasos monoinsaturados, la vitamina E, los beta-carotenos y los polifenoles, proporcionan propiedades antioxidantes que actúan frente al envejecimiento prematuro e intervienen en el desarrollo de las células, el cual resulta determinante para el desarrollo de algunos tipos de cánceres.
Simplificando el concepto, los compuestos del aceite de oliva disminuyen la expresión del gen que promueve la aparición de determinados tumores. De hecho, el aceite de oliva se considera un aliado contra el cáncer de mama.
Mejora la esperanza de vida
En general, el consumo de aceite de oliva virgen extra mejora la esperanza de vida de todos aquellos que lo utilizan como grasa principal. Varios estudios alrededor del mundo han demostrado que aquellos que consumen AOVE, como en la Dieta Mediterránea, tienen probabilidades de vivir más años que aquellos que consumen otro tipo de grasas.
Para poder beneficiarnos de sus excelentes propiedades, es necesario consumir una cantidad diaria recomendada de aceite de oliva. No te olvides de seguir una alimentación equilibrada y saludable y realizar ejercicio físico diariamente para gozar de una buena salud.
Ahora que ya sabemos qué beneficios para la salud aporta el aceite de oliva, resulta imprescindible recordar que el aceite de oliva no es sustituto de ningún tratamiento médico y que, si se padece algún tipo de enfermedad, siempre es recomendable consultar con el médico antes de iniciar cualquier tratamiento paralelo en casa.
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